Atada a la realidad por sogas y deseos.
Privada de libertad, mi cuerpo esclavo deja libre a mi mente, deja mi alma volar alto para descender en picado al mundo que me atrapa.
Siento perderme dentro de mi, siento que mi alma no me pertenece, cautiva en una vida sin sombras, con los ojos vendados veo la Luz florecer en mi interior.
Soy yo, ahora y por siempre seré siempre yo.
Amiga, hola. La verdad es que tienes una forma única al escribir... me encantó.
ResponderEliminarQue alegría volver a saber de ti, Fran... gran alegría de verás...
Eliminarahora estoy inspirada de nuevo, y estaré en mi blog en constancia...
Espero saber de ti también, todo el rato.
Besos y cariños