lunes, 14 de mayo de 2012

MI BRUMA...

La bruma de mi vida me acecha de nuevo, cual serpiente cautelosa. Y lo que me queda, como siempre hago, es quedarme de espectadora hasta que ocurra lo que viene llegando... Una vez que pase, tomar la decisión que crea conveniente en ese momento... Aunque la decisión realmente no seré yo quien la tome, si no lo que me espera, y tengo que aprender...
Desde que me ocurrieron varios sucesos evitables, no levanto la cabeza para sonreír cuanto quisiera... Son sólo rachas de una bruma que me acecha...
No me siento triste. No siento desconsuelo. No siento que la vida no tiene sentido. No siento malos pensamientos. No siento que sea la persona más deprimida. Siento que no sé cómo actuar... A parte de tratar de sonreír, y lo hago... Siento simplemente que la vida me está tratando de dar unas pistas que aún no reconozco.
Quizá la bruma quiera que cambie de lugar, que me ubique en otros páramos... Que cambie mi nivel de intución, y no me siga acercando ni pegando ni aferrando a donde estoy... Simplemente que cambie... Y como no puedo verlo de una manera sencilla, pues no estoy tan atenta, la bruma de mi vida quiere darme ciertos batacazos, para que perciba de una vez por todas...
Ando algo insegura por el futuro incierto.
El que tiene miedo de su futuro, es porque no confía plenamente en sí mismo... Y esa es la frase que atemoriza y ayuda a la par... Qué irónico!
La bruma de mi vida me tiene enfrascada en pensamientos que no desearía tener en este momento.
Todo pasa por algún motivo. Todo ocurre por algo en particular.
Debemos sacar ese coraje para enfrentar lo desconocido, independientemente de que asuste o no...
El miedo es sólo parte de un sentimiento aprendido, y adquirido por las experiencias.
La bruma de mi vida me tiene algo intranquila hoy... Que barbaridad!
Y yo deseando soltar mis alas al viento para poder estar calmada, ante ella, la bruma de mi vida... Tan peculiar...