martes, 28 de diciembre de 2010

HERIDA EN LA RODILLA












Así caminaba, agotada de trabajar tanto, y fue llegando por el parking de mi casa que tropecé con mi propio tacón, y una enana piedrecita que se cruzó entre mis zapatos veraniegos. Así fue como me caí al suelo. Y así mismo, todo el peso de mi cuerpo, cayó encima de ella. Abriendo una herida que marcó mi rodilla, y que, facilmente, marcó un antes y un después de dicha caída... Muy significativa, muy especial herida, muy simbólica, muy lastimera...

Y tanto dolió! recordé viejos tiempos, cuando era infante e ingenua.

Y la curaron las manos sanadoras que me curaban en un pasado que creía haber olvidado, las mismas manos de la misma persona, mi madre...

Caí sobre mi rodilla, al igual que mi corazón se derrumbaba cual idiota.

se derrumbó el mundo que había creado a mi alrededor, creyendo y viviendo una fantasía que ni yo misma, en el fondo de mi ser, podía creerme, como el cuento de hadas que todas nos queremos creer... Vaya cosas!

Esa herida física, me hizo aterrizar sobre las lágrimas que mi pecho aguardaba desde hacía unas horas. La tristeza de la incredibilidad, de la impotencia y de la rabia acumulada durante horas de estres e impotencia.

Y así fue como mi alma quiso mostrarme la mortificación que llevaba procesando durante largas horas, y que dificilmente podría sacar de mi cabeza, de mis pensamientos...

Volver a la realidad... aterrizar en una superficie dura, de nuevo, sin escapatoria, y a sabiendas...

Una mentira convertida en una irremadiable verdad, en la verdadera historia falsa y atónita que no quería creer...

Una lástima dejarse atrapar en una película donde los personajes que tienen su protagonismo quieran dejarse arrebatar... Si son ellos los que lo tienen! Y uno se cree, por un momento, que se lo podrás quitar... O ni siquiera quitar, si no pasar al siguiente capítulo, a la siguiente novela... Imposible. Sólo formando parte de esa conspiración, para saberte parte de su trama y seguir lo pasos de una mentira, de su realidad...

Y mi realidad es que me duele la rodilla y que la costra está a punto de secarse del todo ya... Y no quiere sanarse del todo, por miedo a perder y a agarrarse a la única verdad que en ese momento existe... La verdad es que las heridas por las caídas duelen... La verdad es que marcan, y dejan cicatrices que serán dificiles de olvidar, y de sanar...

viernes, 10 de diciembre de 2010

POR HOY


Quiero ser la que te enseñe a quererme.
Que me quieras sin enseñarte.
Quiero saber de tus placeres, y que adivines los míos con mirarme.
Deseo acariciarte como una pluma, y que mi pelo sea tu escudo.
Quiero ser alumna de tus pensamientos y que me aceptes con la brisa matutina.
Deseo impregnarme con tu sal, y que hagamos pasteles con nuestra azucar.
Quiero oir tu voz a través del viento, y que la tormenta nunca la apacigüe.
Quisiera estudiar tu cuerpo, mientras examino el mío, posando junto al tuyo.
Despertar en plena noche y debatir sobre nuestros sueños.
Simular estar ocupada y estresada para que me sorprendas con alguna deliciosa rareza tuya.
Quebrantar las leyes del amor, y crear y escribir nuestro propio libro.
Dibujar una sonrisa, sin temor a que no esté tatuada.
Asfaltar mis venas, y vivir el momento.
Ver las nubes pasar, bajo la claridad de una incierta Luna.
Volar por tu pecho, y desplegar alas cuando lleguemos a la Mar.
Quisiera... Considerar.. Quisiera...

martes, 7 de diciembre de 2010

MENTIR


Mirando a los ojos, y creyendo en las palabras que salen de su boca, para encontrarte que... Mentía.
Mentir es inventarse una realidad que no existe, y si es así, si es lo que quieren hacer de tí, será mejor vivir en la realidad.
Difícil de mantener viva una mentira, tiene determinado tiempo de vida, porque las mentiras tienen eso, que no se dejan recordar bien, y los detalles fallan, aunque tengas una excelente memoria.
Mentir es mentirse a uno mismo...
Mentiras, son los secretos de una cobardía que te atrapa y no te dejará salir del laberinto afilado de la discrepancia y de la angustia.
Mentir te quitará el sueño, y hará que tu conciencia te arrolle...
Mentir es algo ilógico. Sin sentido, sin ningún sentido.
No confundamos mentir con cobardía... Puedes ser cobarde y no mentir jamás. Puedes ser mentiroso, y muy valiente. Pero mentir te convertirá en cobarde, y la cobardía no te convierte en mentiroso.
Quizá el mentir sea la manera que tiene el ser humano de sentirse más seguro!
Quizá cuando me mientes una y otra vez, piensas que no me voy a enterar, que no tiene importancia... Lo que no sabes es que no lo perdono... Lo que no sabes es que ya sé que me has mentido, y la confianza ya no reina entre nosotros, ni reinará armonía alguna... No mentir es la mejor opción para que sigamos por el camino de la vida... Por el contrario, el mentir me aleja, me aleja, me aleja... Tanto, que ni siquiera sabes que ya ni te veo... Y lo peor es que ya no me verás...
Por mentir...