viernes, 25 de febrero de 2011

ALEJAMIENTO


Aléjate de todo lo que creas que te puede provocar algo negativo, o que te reste. buen consejo para poner en práctica y para tratar de mantener...
Aléjate de las cosas feas, que huelan mal, que te inciten a ser negativo, a pensar en cosas que en nada te hacen crecer ni aprender.
Aléjate de lo ruín, de lo pecaminoso, de lo que provoque malos augurios...
Aléjate de lo triste, de lo perverso, de las inquietudes que te hagan sospechar que no sirves.
Aléjate de todo lo que no te guste, y trata de tener un positivo acercamiento con la humildad y con el buen sentir, con lo bueno que veas en tí y a tu alrededor...
léjate del demonio, de los sollozos que no sirvan para avanzar.
aléjate de lo que te deje atrapado en un pasado que ya no se puede recuperar, que está perdido.
Aléjate de la mentira. Tanto de decirla como de recibirla, aléjate fuertemente, y agárrate a la verdad de tu mente y de tu corazón... Agárrate fuertemente a esto, y ALÉJATE de lo que no te convenga, por el motivo que sea, lo que el alma te dicte...
ALÉJATE...

martes, 22 de febrero de 2011

LEJANÍA


A veces puedo sentir la lejanía de mis seres queridos, que se encuentran tan lejos... Otras siento la lejanía de los que están cercanos, y de cualquier forma, es lejanía... La lejanía, lejanía es...
Siento ganas de verlos, sentirlos y disfrutar de su presencia, tan lejana...
La lejanía también viene de sitios, de olores, de momentos, de situaciones... Lejanía al fin...
Siento lejana muchas de mis manías, y muchas de mis costumbres... Lejanía de mi corazón, o del que creía que era... Lejanía al fin...
Lejanía de mis libros, de sus lecciones, y de mis momentos con ellos, tan lejanos ya de mi mente, que la lejanía está casi destruyendo alguno de los recuerdos que tenía allí... Lejanía al fn...
Lejanía de mis momentos mirando el Mediterraneo a solas conmigo misma... Lejanía al fin...
Lejanía de mi mente enredada en cosas sin importancia, y en otras con mucha, pero lejanía al fin...
Lejanía del caracter de mi tierra, de las costumbres ociosas, y de los ruidos, lejanía al fin...
Lejanía de mis manos tocando fondo una y otra vez y disimulando lo que acontecía para conmigo, pero lejanía al fin...
Lejanía de los ojos que me miraban y que querían desnudarme cada noche, lejanía elegida, pero lejanía al fin...
Siento lejanía de todo lo que está lejano fisicamente, y también de lo que está cerca, porque es lo que no puedes tocar, sólo sentir, y me siento lejana de muchas cosas... Lejanía al fin...

lunes, 7 de febrero de 2011

REDIRECCIONANDO


Redireccionando mi vida me encuentro... Y es que sabía e intuía que todo tenía que volver a cambiar, y es así como ha sido, y es así como será, porque cada cierto tiempo tengo que redirecionarme, soy así...
Tomando de nuevo las riendas de algo que en algún momento pudo parecer que perdería y que dificilmente se recuperaría, pero aquí está... Redireccionado de nuevo... hasta que suelte estas bandas que ahora escojo, y regrese a querer cambiar de nuevo. O bien porque la vida me pone en esas circunstancias, o bien porque me creo con la elección de poder hacerlo...
La cuestión es que la energía está fluye que fluye... Cambia que cambia... Y ya están aquí los mejores tiempos que tuve dormidos durante este tiempito... Y la alegría amanece conmigo, porque se instala cada noche mientras duermo, así que, cuando despierto, la sonrisa se instala en cuanto suena la alarma que me desespereza para tener que salir a la calle...
Y el rumbo hacia lo que deseo está empujando mis ganas, cada día... Y estoy alineada, redireccionada...

viernes, 4 de febrero de 2011

RECUERDO INFANTIL


Recuerdo que había que esperar para que el autobús apareciera, era tempranísimo, y hacía mucho frío. La parada casi siempre estaba llena de gente, esperando, como lo hacíamos Jaime y yo. Cuando por fin aparecía, era como una sorpresa muy agradable, una roja sorpresa. El circular se llamaba en esa época este autobús que nos llevaba al cole. íbamos juntos, todas las mañanas. Nos sentábamos uno al lado del otro, pero casi nunca hablábamos. Jaime siempre llevaba su música puesta, y si estaba molesto conmigo, se sentaba lejos, para que nadie viera que iba con él... Pero lo más tierno de todo es que jamás me quitaba la vista de encima, disimulando y protegiéndome. Siempre cuidó de mí, aunque quería aparentar que no.
Recuerdo cuando miraba por la ventana, y veía los coches pasarnos. Las personas dormidas, caminando por las aceras. Los niños deseando regresar a casa y no ir al destino de cada mañana...
Recuerdo que siempre pasábamos por un descampado que estaba lleno de basura, y me llamaba mucho la atención que entre los escombros y desperdicios había mucha ropa, o telas. Y tengo bien grabado el recuerdo de un color fucsia que odiaba y detestaba. Tenía como una especie de fijación con eso. Cada día, practicamente a la misma hora, cuando lo veía, me irritaba pensar que pudiera haber alguien que le gustara esa tonalidad... Que tonterías dices! Me expresaba Jaime...
Recuerdo que si tenía frío, Jaime me abrazaba. Recuerdo que me preotegía por encima de todo, y que el camino de todos los días hacia el colegio, era a su lado...
Hasta que nos separamos, y él pasó al instituto, y yo seguía en el mismo, y entonces ya nuestra ruta en nada tenía que ver... Pero siempre tendré eso para mí...
No lo escribo desde la tristeza, no. Lo recuerdo como algo muy mío, algo que nada ni nadie podrá arrebatar, porque es un recuerdo que sólo me pertenece a mí, y que es maravilloso!