Lo cierto es que tu nombre es Javier... Amorcito, siempre te he llamado asi, hasta ahora mismo, incluso... Y eso es lo que siempre seras, porque la misma palabra lo describe... Mi Amorcito...
Esa sonrisa complaciente siempre derritio mi corazon, y con un solo gesto podias hacer que mis segundos se pararan, no existiera nada mas a mi alrededor, ni fuera ni dentro de mi, que no fuera tu inmensa presencia que era TODO...
Hasta la ultima sonrisa que pude contemplar fue bella...
Hasta el ultimo beso, nunca frio...
Hasta las lagrimas contuviste con tal de no hacerme sentir mal por mis decisiones...
Hasta el largo abrazo de despedida se hizo inquebrantable... Aun lo siento en mi...
Has sido, eres, y siempre seras, el amor de mi vida...
Mi consuelo, mi apoyo, mi letargo, mi frenesi, mi desesperacion, mi anhelo, mi ansia, mi agonia, mi delirio, mi pesadilla, mi maravilloso refugio... MI ANGEL!
Apareciste uno de esos dias tan vacios, para llenarlo todo y querer compartir el resto de tus dias conmigo...
Asi fue, hasta el dia en el que tomamos esas decisiones...
Decisiones apropiadas o no, segun se mire, pero con la conviccion de querernos siempre...
Y querernos bien...
Porque no todas las almas aprecian un buen sentimiento sin egoismo, sin maldad y con un apice de frialdad para no lastimar demasiado...
Siempre te llevo aqui...
Mi Amorcito se ha convertido en el ser mas maravilloso de la faz de la Tierra, y ademas de vivir su vida como le place, vive en mi corazon, y alli morira por siempre, por los siglos de los siglos...
Te quiero!
martes, 7 de julio de 2009
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